¿Qué es lo que tiene la música venezolana?

¿Qué es lo que tiene la música venezolana?

MARÍA DENISSE FANIANOS DE CAPRILES |  EL UNIVERSAL

miércoles 14 de septiembre de 2011  03:14 PM

Siempre que estoy sin ganas de hacer lo que me toca hacer, o cuando estoy un poco desanimada, pongo un CD de música venezolana, y basta y sobra para que me entren unas energías increíbles que me ponen a cantar y a bailar en la cocina o en el lavandero. Y cada vez que voy a un acto en el colegio de los niños (donde normalmente nuestra Alma Llanera nunca falta) comienzo a llorar como una verdadera boba.

Y yo siempre me pregunto: ¿qué es lo que tiene la música venezolana que me remueve el alma y el corazón? Claro, yo podría pensar que es mi sangre caroreña la que me mueve las fibras musicales, pero resulta que no son solamente los venezolanos los que se estremecen con ella. Hemos visto a ingleses, alemanes, suizos, etc., pararse de sus butacas y moverse (porque la mayoría no saben bailar) ante los maravillosos conciertos de los músicos venezolanos que han sido, y son, una gran gloria para nuestro país (empezando por el gran Alfredo Sadel, nuestro queridísimo Simón Díaz, la Billo´s Caracas Boys, el genial Dudamel y el Sistema Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles, la increíble Serenata Guayanesa, la dulce María Teresa Chacín, Aldemaro Romero y su Onda Nueva, el inigualable Gurrufío, el popular Un Solo Pueblo, el llanerísimo Reynaldo Armas, Gualberto Ibarreto, Cheo Hurtado y su siembra del cuatro, los infaltables Maracaibo 15 y Guaco, y miles de miles más que quisiera nombrar pero no puedo porque no me quedaría espacio para escribir más nada.

A todos ellos ¡mil gracias por transmitir tanta maravilla y darnos fuerza cuando la necesitamos! ¡Mil gracias porque muchos de ustedes están educando hoy a miles de niños y jóvenes que seguirán sus pasos y traerán nuevas glorias musicales a nuestra patria amada! Opino que a todos los músicos venezolanos se les debería dar un Premio Nobel de la Paz, porque la unión y alegría que ellos han sembrado en nuestro país, en momentos de grandes problemas, ha sido realmente increíble.

¿Pero qué es lo que tiene de especial nuestra música venezolana? Supongo que tiene un significado muy grande porque nos ha acompañado desde bebés cuando nuestro papá le ponía aquel disco de "Ansiedad...de tenerte en mis brazos..." de Chelique Sarabia a nuestra mamá; y más tarde nos ponían "el niño Simón Bolívar... tocaba alegre el tambor....". Y ni hablar de los villancicos que nos hacían pensar que "si la Virgen fuera Andina... y San José de los Llanos.... el Niño Jesús sería... un niño venezolano". ¿Ustedes se han preguntado cuántos niños venezolanos han tocado alguna vez en su vida "Compadre Pancho" o han bailado al ritmo de "Ayer salió la lancha e' Nueva Esparta..."? ¿Y quién no se ha emocionado oyendo al Quinteto Contrapunto interpretando "Las Brisas del Torbes" o las "Noches Larenses"?. ¿Y qué decir de nuestras gaitas? ¿A quién no se le ha "aguao el guarapo" cuando escucha: "Cuando voy a Maracaibo y empiezo a pasar el puente, siento una emoción tan grande que se me nubla la mente, siento un nudo en la garganta y el corazón se me salta, sin darme cuenta tiemblo y sin querer estoy llorando.... Ooohhh...."? Y ni hablar de las reuniones domingueras con cachapa, cochino frito o parrillita, cervecita y los infaltables "Caballo Viejo", "Moliendo Café" o "Pajarillo", que siempre nos pone los pelos de punta.

Pero para mí no hay como nuestra Alma Llanera de Pedro Elías Gutiérrez, estrenada en el Teatro Caracas en 1914. ¿Qué es lo que tiene el Alma Llanera? Tiene amor, amor del grande por nuestra patria. Amor por la espuma de nuestras cascadas, por las sabrosas playas y maravillosos ríos; por nuestras majestuosas montañas, y por nuestro envidiable Sol. Y nos remueve porque definitivamente los venezolanos somos apasionados: "Amo, Lloro, Canto, Sueño... con claveles de pasión... con claveles de pasión". Pasión desbordante de un pueblo que ama inmensamente a su país; que ha llorado mucho estos años; que canta para poder seguir luchando con alegría; pero sobre todo que sueña, que sueña no solo con claveles de pasión sino con un país donde TODOS podamos vivir unidos y en paz disfrutando las grandes maravillas que Dios nos ha dado.

Así que es ¡Amor! lo que tiene la música venezolana. Porque hemos crecido con ella; hemos saboreado nuestras delicias culinarias con ella; hemos recorrido nuestras bellezas naturales con ella; hemos compartido momentos inolvidables, con nuestra familia y amigos, con ella. Y también hemos llorado con ella: llorado de dolor por tanta injusticia, y de emoción porque sabemos que siempre que luchemos tendremos esperanza. La esperanza de ver un país lleno de paz y justicia para todos en esta Tierra de Gracia donde Dios quiso que naciéramos, cantáramos y bailáramos.

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